jueves, 31 de diciembre de 2009

Insomnio

Acabo de empezar a redactar el último capítulo de mi tesina. Todavía faltarán las conclusiones y la introducción, así como un penúltimo repaso general, pero el final ya se ve más cerca. En realidad los agobios no me quitan el sueño, pero, porque me gusta, dejo aquí estos versos de Borges, que forman parte del libro El otro, el mismo, el mejor de los suyos, junto con El hacedor:

INSOMNIO

De fierro
de encorvados tirantes de enorme fierro, tiene que ser la noche,
para que no la revienten y la desfonden
las muchas cosas que mis aborrotados ojos han visto,
las duras cosas que insoportablemente la pueblan.

Mi cuerpo ha fatigado los niveles, las temperaturas, las luces:
en vagones de largo ferrocarril,
en un banquete de hombres que se aborrecen,
en el filo mellado de los suburbios,
en una quinta calurosa de estatuas húmedas,
en la noche repleta donde abundan el caballo y el hombre.

El universo de esta noche tiene la vastedad
del olvido y la precisión de la fiebre.

En vano quiero distraerme del cuerpo
y del desvelo de un espejo incesante
que lo prodiga y que lo acecha
y de la casa que repite sus patios
y del mundo que sigue hasta un despedazado arrabal
de callejones donde el viento se cansa y de barro torpe.

En vano espero
las desintegraciones y los símbolos que preceden al sueño.

Sigue la historia universal:
los rumbos minuciosos de la muerte en las caries dentales,
la circulación de mi sangre y de los planetas.

(He odiado el agua crapulosa de un charco,
he aborrecido en el atardecer el canto del pájaro.)

Las fatigadas leguas incesantes del suburbio del Sur,
leguas de pampa basurera y obscena, leguas de execración,
no se quieren ir del recuerdo.
Lotes anegadizos, ranchos en montón como perros, charcos de plata fétida:
soy el aborrecible centinela de esas colocaciones inmóviles.

Alambre, terraplenes, papeles muertos, sobras de Buenos Aires.

Creo esta noche en la terrible inmortalidad:
ningún hombre ha muerto en el tiempo, ninguna mujer, ningún muerto,
porque esta inevitable realidad de fierro y de barro
tiene que atravesar la indiferencia de cuantos estén dormidos o muertos
—aunque se oculten en la corrupción y en los siglos—
y condenarlos a vigilia espantosa.

Toscas nubes color borra de vino infamarán el cielo;
amanecerá en mis párpados apretados.


Jorge Luis Borges

viernes, 25 de diciembre de 2009

Feliz Navidad


"Millones de años después de la creación, cuando la tierra era materia incandescente, girando sobre sí misma; millones de años después de brotar la vida sobre la faz de la tierra; miles y miles de años después de que aparecieran los primeros humanos, capaces de recibir el Espíritu de Dios; unos mil novecientos años después de que Abrahán, obediente a la llamada de Dios, partiera de su patria sin saber a dónde iba; unos mil doscientos años después de que Moisés condujera por el desierto hacia la tierra prometida al pueblo hebreo, esclavo de Egipto; unos mil años después de que David fuera ungido rey de Israel por el profeta Samuel; unos quinientos años después de que los judíos, cautivos en Babilonia, retornaran a la patria por decreto de Ciro, rey de los persas; en la ciento noventa y cuatro Olimpíada de los griegos; el año setecientos cincuenta y dos de la fundación de Roma; el año cuarenta y dos del reinado del emperador Octavio César Augusto, estando el mundo entero en paz..."

El resto ya lo conocéis. Que paséis un maravilloso día de Navidad, espero de todo corazón que la rememoración de este hecho histórico os colme de bendiciones.

[Foto de mi portal de Belén]

miércoles, 23 de diciembre de 2009

XXXI Media Maratón Sevilla-Los Palacios

Un año más, y ya van tres, he disfrutado de esta media maratón, que congrega a unos 3000 atletas -y a algunos despistados como los de la foto-. Sufrir también tocó, sobre todo en los últimos kilómetros antes de llegar a Los Palacios, en los que entraba un fuerte y gélido viento de costado que hacía que los 2º de la salida parecieran -2. Menos mal que, como siempre, en los tres últimos kilómetros, por el pueblo, la gente se echó a la calle para (c)alentarnos con sus aplausos. Y entre ellos, Tere y Marta. También estuvieron mi padre y mi abuelo, pero se fueron antes, por lo que me detendré en la gesta de las chicas. Su apoyo nos llegó en forma de gritos, tal vez porque no se atrevían a sacar las manos de los bolsillos, pero llegó, de eso no hay dudas, y, gracias a ellas, más de uno pudo sonreír en el kilómetro 19. Del frío que pasaron también hay testimonio gráfico, pero dejemos el chantaje para otro momento. Ahora bastará con mostrar públicamente mi más sincero agradecimiento.
En lo estrictamente deportivo, hay quien dice que lo importante en las carreras es participar, pero yo disfruté de lo lindo mejorando mi anterior Mejor Marca Personal (MMP) en la distancia en más de nueve minutos. Al final, 1:39:06. Los demás también cumplieron sus objetivos, excepto Miguel, que quería bajar de dos horas y no lo consiguió, no por falta de fuerzas, sino por echarle una mano a otro corredor, que iba muy justito. Quien le conoce sabe que es un alma caritativa, pero también pone en duda que se quedara a ayudar a un tal Juan. Sería, sin duda, Juana o Juanita. No quiero terminar sin decir que por un momento pensé en poder batir la MMP de este galán (me quedé a un minuto y algo), pero uno también tiene su corazoncito y, ante todo, respeta a las personas que tienen ya una edad.

[En la foto, tras la carrera, de izquierda a derecha, Jesús, el menda lerenda, Miguel, Heiko y Rafa]

martes, 22 de diciembre de 2009

Oscuridad

Ayer se fue la luz a las 8 de la mañana y no volvió hasta las 11 de la noche. Y cuando uno no puede trabajar en el ordenador -donde tiene media tesina-, se tiene que tomar la sopa fría y a las 4 y media de la tarde no puede seguir leyendo porque llueve y apenas entra claridad por la ventana, se da cuenta de su dependencia de la luz.

Más tarde, sobre las 7, al apagar la vela y andar por el lento pasillo antes de salir de casa, uno piensa no tanto en Borges como en la abstracción de todos los invidentes. También piensa que la soledad es la ausencia de los sentidos.

martes, 15 de diciembre de 2009

Cuestión de peso

Hace poco, Cruzcampo -como, por ejemplo, Michelín- decidió adelgazar a su icono publicitario. Lo gordo no vende, pensarían. No sé si hará falta que diga que no me gusta la operación de cirujía a que sometieron al bueno de Gambrinus, donde esté el auténtico con su hermosa barriga que se quite el falso, el de la versión palomo.

Pero parece que la estrategia comercial no les ha salido tan bien como pensaban, porque vuelven a llevar a su clientela por el camino de los kilos de más. "¡Consigue tu peso en cerveza!" es el eslógan de la nueva promoción.

Éste es un primer paso, pero no basta, yo aún sigo esperando que me devuelvan a mi Gambrinus.

domingo, 13 de diciembre de 2009

La soledad del corredor de fondo

El poeta, consagrado a una labor inexcusablemente solitaria -que por sí misma le justifica y recompensa-, gusta de un lector que disfrute sus textos, de una tertulia en la que compartirlos y en la que exponerlos al debate, de un crítico mordaz que los destripe.

El corredor de fondo, como el poeta, encuentra en cada uno de los kilómetros que recorre la soledad y, al mismo tiempo, el consuelo. Por eso, este blog le viene como anillo al dedo. Porque, aunque se sabe justificado por el paso de los kilómetros y por las suelas gastadas, también le gusta compartir entrenamientos, picarse con un compañero y contar sus hazañas.

Por cierto, dentro de exactamente una semana es la Media Maratón Sevilla-Los Palacios, algo os contaré de ella.

jueves, 10 de diciembre de 2009

¿El tamaño importa?

Parece que sí. La preocupación por el tamaño no es nada nuevo, ya Gracián decía aquello de que "lo bueno, si breve, dos veces bueno, y aun lo malo, si breve, no tan malo", que ha pasado al refranero popular. Y, hablando de refranes, también tenemos este otro: "Caballo grande, ande o no ande". Son sólo dos ejemplos de que el tamaño importa, claro que importa.
La reflexión metabloguera -o meta twittera- ya está hecha aquí, con gran sutileza además. Y si nos adentramos en la historia de la literatura encontraremos numerosas preceptivas sobre el tamaño. Imposible abarcar todo ello cuando la paciencia del lector de blog se escurre incesante como los granos de arena del reloj.
El lector de microrrelatos también es un lector impaciente, o demasiado ocupado, y el género le viene como anillo al dedo, porque las novelas -como las bicicletas- son para el verano.

martes, 1 de diciembre de 2009

Títulos

Cuando daba clases de Lengua y Literatura, algunos alumnos, al leer un texto delante de sus compañeros obviaban el título, con mi correspondiente enfado. El título forma parte de la composición les decía. Es cierto que no todos los títulos funcionan de la misma manera, pero todos tienen una misión. Una vez dicho eso, está claro que hay títulos triviales, títulos certeros y títulos sin los que no se entiende un texto.
aaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa
También está claro que un blog se alimenta de otros blogs. Por ejemplo, Rafa reconoce aquí inspirarse en este microrrelato. Pues bien, ahora yo reconozco el impulso de esta otra entrada para la mía. En el segundo microrrelato de Santino el título es fundamental, cómo no iba a serlo si es más largo que el resto del texto. Y todo ello me ha hecho recordar un textito de hace ya muchos años:

aaaaaaaaaaaaaLa mar de posesivo

Sólo quería abrazarla y que ella descansara en su regazo para siempre. Por eso, cada vez que desde las lanchas intentaban rescatarla saltaba embravecido.